La respuesta da para un libro (como el que escribo en estos días) pero vale la pena detenerse un rato en ella para considerar un par de elementos.
Lo primero es pensar en dos conceptos: diseño y estrategia de contenidos, ambos desarrollados por autoras con experiencia como redactoras de información para sitios web y que, por lo mismo, aprendieron en la práctica lo que se requiere para cumplir con lo que necesita un sitio web para iniciar su trabajo.
Winters explica que el diseño de contenidos es la capacidad de utilizar datos y evidencias para dar al público lo que necesita, en el momento en que lo necesita y de la forma que espera. Mientras que Halvorson señala que la estrategia de contenidos es aquello que conecta los esfuerzos de contenido de una organización con los objetivos empresariales y las necesidades de las personas que los utilizan.
Si nos fijamos en ambas ideas, antes de partir hay que planificar muy bien para conectar lo que desarrollemos y presentar dos fuerzas motrices: lo que hay que conseguir —es decir, lo que podríamos llamar los objetivos de negocio de la entidad que es dueña del sitio web— y las necesidades de las personas que vienen a buscar la información.
¿Y la redacción?
Debe esperar porque forma parte de lo que se hace una vez que se completan los pasos anteriores. Aunque es fácil lanzarse a crear contenidos sin haber cumplido con estas acciones previas, se comprueba al poco tiempo que lo que se presenta no conecta con nadie, no consigue resultados o no cumple con lo que se pide a este tipo de elementos de información: ser útil, usable y atingente a quien lo va a recibir.
Por eso, parece interesante darle una mirada a la imagen que entrega otra autora: Linnette Voller, una especialista en contenido visual.
Al revisar su diagrama, podemos volver a la pregunta que inicia este texto: ¿qué se necesita al comienzo? Pues, todo aquello que se ve bajo el mar en el dibujo. En cada una de las piezas que se incluyen allí está el secreto de lo requerido por un espacio digital para cumplir con los objetivos que se propone el negocio que se quiere realizar.
Una última línea: si alguien llega a decir que hacer contenido es fácil y rápido… no le creas.