He tenido la suerte de estar cerca de algunos amigos que en este marzo han cambiado de trabajo y han comenzado a desarrollar proyectos en casa nueva. Por un lado, Manuel Contreras que desde Mouse.cl llega a Cooperativa.cl y por otro a Miguel Paz, que desde LND pasa a El Mostrador.
El primero va a desarrollar un proyecto que se ve muy interesante y en el que yo mismo he participado en el pasado (disclaimer: y espero seguir apoyando) y el segundo, llega sólo como reportero, aunque me queda claro que con su experiencia en medios digitales deberían sacarle mayor provecho.
Deberá pasar algún tiempo para que veamos resultados, pero quiero hacer una apuesta a favor de ambos por apoyar un hecho central: ellos son periodistas digitales. Esta no es sólo una distinción sutil para destacar que trabajan en medios de Internet, sino que es algo mayor y se refiere a que su concepción del medio pasa porque entienden que es un producto que vive en la red y la utiliza para expandirse, no sólo para presentarse.
Desde que Marc Prensky escribiera la diferencia entre los nativos y los inmigrantes digitales a través de su paper The emerging online life of the digital native, esta separación entre quienes entienden el nuevo medio porque nacieron con él y quienes sólo lo usan porque aprendieron cómo hacerlo, comenzó a cobrar relevancia.
A partir de esta distinción, lo digital se puede aplicar a prácticamente cualquier profesión debido a que ya no se trata de tomar los conocimientos de siempre y entregarlos vía Internet… para eso basta con eso es ser inmigrante. Para ser nativo, hay que pensar la profesión de nuevo y reinventarla con la red incluida.
En el caso del periodismo digital, lo que se debe considerar, por ejemplo, es que el público que recibe la información no es sólo receptor, sino que también es emisor y por lo tanto el sitio web de noticias debe estar preparado para ofrecerle herramientas a quienes lo visitan con el fin de que cumplan ese rol. Si eso no ocurre, la potencia del medio se desvanece y al abstenerse de emplear sus principales atributos, es difícil que pueda lograr los objetivos que esta nueva plataforma plantea.
Por lo tanto, podemos decir que el periodismo digital se está nutriendo hoy de nuevas ideas que mueven los medios que lo utilizan. Esas ideas son las de la participación, la contextualización usando la red, la inmediatez, la dispersión de las fuentes gracias a las barreras geográficas que la propia red ayuda a quebrar y finalmente, la multimedialidad ofrecida por la plataforma computacional que la sustenta. De todo eso se hace cargo el periodista digital y hacen bien las empresas que se fijan en nativos como Contreras y Paz. Ojalá les den las herramientas para que nos inventen una nueva manera de informar.