Una nueva tendencia parece estar asentándose entre los creadores de aplicaciones computacionales, la cual se ve favorecida por el hecho de que la Internet se esté expandiendo fuertemente. Se trata de un modelo que permite que los usuarios accedan a productos que van cobrando su tarifa a medida que se van usando.
Esto, que parece algo normal en el mundo real, ya que es la forma en que se brindan casi todos los servicios (pensemos en cómo se cobra la electricidad o el agua, por ejemplo), no había llegado a Internet, el paraíso de lo gratuito. Pero todo parece indicar que es irreversible, especialmente cuando se aplica a la difusión de contenido premium.
Dos señales fuertes en este sentido, conocidas en los últimos días, fueron el anuncio de Napster de que llegó a un acuerdo con los dueños de los derechos de autor de las canciones que antes repartía gratuitamente y la campaña que comenzó a hacer la compañía Real Networks (fabricante del Real Player), respecto de su nueva plataforma de servicios conocida como RealOne.
En el caso de Napster, se anunció que pagará 26 millones de dólares por terminar el juicio que hay en su contra y a cambio podrá sacar adelante su sistema de suscripciones de música. Pagado, por cierto… Si bien la batalla judicial no terminará ahí, se especula que será un acuerdo clave como para finalizarla por completo. De hecho en Napster ya anuncian que hacia fines de año su nuevo servicio –para el cual no hay precio publicado-, comenzará a funcionar.
Y en el caso de Real Networks, se indica que RealOne será un sistema para contenidos especiales, basado en un software que incluirá en la misma pantalla, un navegador, un sistema de audio y otro de contenidos multimediales. Es decir, un tres-en-uno. Se ha anunciado que la compañía lo ofrecerá a terceros para que a través de esa vía entreguen su contenido. Naturalmente que para usarlo, habrá que estar suscrito. La compañía anuncia que con esto está transformando la forma en que se crea y se consume y el contenido digital y para llevarlo adelante tiene como socios a grandes proveedores como ABC, CBS, EMI, Discovery, MTV, Terra, … la lista es larga.
Bueno, como si lo anterior no bastara para creer efectivamente que estamos ante una nueva tendencia, hay que recordar que se nos viene encima XP, la nueva versión de Windows, que precisamente inaugura el concepto de usar la red para asegurarse de que sólo un usuario emplea la licencia del sistema operativo que está en su PC. Esto es el primer paso para la idea ampliamente difundida en los años previos, de que se podrá “comprar” horas de uso de determinados programas, a valores que no tendrán comparación –por lo baratos- con adquirir una licencia completa…
Así las cosas, no es difícil considerar que la era de los programas con taxímetro, está a punto de comenzar.