Uno de los temas que me han motivado en torno a los contenidos digitales, es como pasar desde la información hacia la acción. Es decir, es decir, que lo que se lee o ve en un espacio, permita “hacer” algo.
Cada vez que encuentro algo en este estilo, lo dejo anotado, como ejemplo. Así que va esta nota con algo que vi en el NYT. Se trata de una lista de libros de memorias, luego que sus críticos literarios eligieran las 50 mejores obras de este tipo desde el año 1969 en adelante.
El contenido es simple: una sola página en que los libros aparecen ordenados de 1 a 50 con título, foto y reseña.
Pero le agregan dos capacidades inetractivas. Una, son botones para comprar en librerías locales o en sitios online. La otra, la posibilidad de hacer una lista propia que se va agregando durante la lectura, para que uno vaya creando su propia lista que luego se envía por mail. Simple, rápido y efectivo.