Quiero hablar de algo diferente de lo habitual en este blog por esta semana, a propósito de la fecha.
En marzo del ’80 entré a estudiar Periodismo en la PUC, en Santiago. En junio, tras vivir los primeros meses en una escuela que intentaba guiarnos por el camino de ser comunicadores, nos estremeció una noticia terrible. Uno de nuestros compañeros de los años superiores, había fallecido. José Eduardo Jara, era su nombre.
Creo haberlo visto una vez, no lo conocía. Su muerte, no obstante, abrió ante nosotros la realidad que en esa escuela y en la propia universidad no se trataba. Lo habían torturado y la causa de muerte fue un paro cardiaco producido debido a los golpes recibidos. Pero, lo que nos dijeron entonces, era otra historia. No había nada claro, no se sabía mucho y era mejor no preguntar.
Hoy, 11 de septiembre de 2018, en la entrada de la Facultad de Comunicaciones de la UC y gracias a un trabajo apoyado por la FEUC, se instaló una placa en su recuerdo y en el de otros ex compañeros de estudios, víctimas de la dictadura.
Es bueno que haya memoria, que recordemos, que volvamos y entendamos lo que pasó, por qué pasó, cuándo, dónde y quienes participaron. Saber quiénes reaccionaron bien, mal, indolentemente. Porque siempre hay que buscar la forma de aprender de lo vivido. La memoria hace bien.
Por eso, creo que también es bueno replicar acá la Carta Abierta que entonces firmaron tres alumnos y un profesor (nuestro maestro de fotografía), en recuerdo de José Eduardo Jara. Dice:
Carta abierta a José Eduardo Jara
Ciertamente no podríamos decir, Eduardo, que eras el mejor alumno de la Escuela… pero sí el con mayor ilusión y el de mayor esfuerzo. Y casi nos acostumbramos, Eduardo, a verte de repente en esa dulzura que pocas miradas pueden transmitir. Llegabas a la escuela sembrando pan entre quienes te rodeábamos. Y luego de ibas con apenas unos pesos y un pan en el bolsillo para visitar Villarrica en lo álgido de tu triste enfermedad. Con un apretón de manos te sabíamos de nuevo cerca. Hoy no podemos conformarnos. Tu viaje es demasiado trágico, tu partida demasiado injusta. El dolor que hoy nos une a tus profesores y compañeros es tu propio dolor que ahora es nuestro, amigo de la mirada tan dulce.
Encerando, haciendo pequeñas clases, fotografíando, mantuviste a tu mujer y a tu hijo con la ilusión de un título que te alejaría de los vidrios y cera. Y nos duele a los que te quisimos, Eduardo, que te traten de “mujeriego” ya sabemos que le duele a tu esposa y algún día le dolerá a tu hijo. Y tú que vivías y estudiabas para ellos. Nos duele que digan que siempre llegabas tarde. ¿Cómo no hacerlo cuando se anda a pie y no quedan todos los vidrios limpios? A tu muerte llegaste tan temprano. Nos duele que se te trate de extremista porque jamás hubo en tu boca palabras de odio. No fue fácil tu vida, Eduardo; y a un semestre de terminar, un monstruoso equívoco, uno más de la violencia, la segó para siempre.
Tu muerte, Eduardo, que no sea en vano, que nos aclare la conciencia, que el mensaje escrito con ella sea el editorial más profundo que nos despierte a la paz. Porque no puede ser, porque el silencio y la palabra que se quiebra nos invita este oscuro amanecer de invierno a gritar por la vida, simplemente por la vida, la misma que te quitaron.
Es tan profunda la huella que deja tu herida porque pareciera que tu bondad causó menosprecio; y tus gritos, golpes. Y una vez más los hombres nos equivocamos. Para Eduardo no habrá vengadores porque tu vida no se paga con la de nadie.
Andrea Vial
Cecilia Serrano
Juan Domingo Marinello
Liliana Martínez
La instalación fue destacada además por la publicación de la Facultad de Comunicaciones, a través de su red social:
Anoche, alumnos de @fcomuc y @feuc, inauguraron una placa que recuerda a Diana Arón, Carmen Bueno y José Jara, todos víctimas de la dictadura y exalumnos de esta Facultad. Sala COM 104, frente al patio de Comunicaciones. pic.twitter.com/3iJtaAjYKA
— Comunicaciones (@fcomuc) September 11, 2018
Finalmente, más información de esta historia se puede ver en Memoria Viva, Wikipedia y el Colectivo Memoria UC.