La foto que Ellen DeGeneres se tomó en la ceremonia de entrega de los premios Oscar, me dejó pensando en los medios, ya que desde mi punto de vista, marca el fin de los mismos.
Obviamente se trata de una apreciación incompleta y que hasta puede no ocurrir en un plazo relativamente razonable (porque los medios seguirán existiendo por muchos años más), pero es interesante notar que ocurrió algo en esa actividad, que la hace distintiva.
Lo que pasó es que hasta antes de estos tiempos de redes sociales, para que un acontecimiento fuera conocido, era necesario utilizar un medio de comunicación como el vehículo irremplazable para hacerlo conocido y transportar ese contenido hacia la audiencia que, hasta ese momento, no tenía idea de su existencia.
Sin embargo, como ahora tenemos las redes, ha comenzado a ocurrir que las fuentes de información han construido sus propias audiencias. Por ejemplo, Ellen, la animadora de la ceremonia del cine es seguida por 28 millones de personas a través de Twitter y un poco más de 13 millones en Facebook. Es decir, ella tiene más seguidores que muchos medios y, por lo mismo, no los necesita para difundir sus mensajes, ya que se relaciona en forma directa con quienes están realmente interesados en lo que tiene para contar.
En el caso de la fotografía que comentamos, no sólo consiguió difundirla, sino que sus seguidores se encargaron de llevarla más allá y marcar el récord actual para la plataforma Twitter, con más 800 mil “retweets” en una hora y más de 3 millones al día siguiente. Mientras en Facebook consiguió 1.9 millones de “me gusta” en el mismo lapso. Sin contar la cantidad de medios que transformaron el hecho en una noticia… que contaron al día siguiente.
Pero hay más. La foto fue también una promoción para la marca del teléfono usado, la que pagó para que ello ocurriera de la manera en que pasó. Vale decir, Ellen no sólo fue un medio, sino que además, uno que se financia a sí misma.
¿Qué me deja todo esto como resumen? A los que nos interesan los medios, la sensación de que algo cambió para siempre. El medio de comunicación tradicional deja de ser tan relevante como antes y queda atrás de otros, que por sus características, le ganan en la capacidad de reacción. Y lo segundo, que las personas son el medio gracias a la capacidad que les dan las redes sociales y, por lo mismo, veremos que en forma creciente será la habilidad de usarlas la que determine su posición en un mundo que pone la comunicación en primer plano.