Los cambios que esperamos en las pantallas que muestran noticias

The New York Times está llevando adelante un rediseño que forma parte de su trabajo por ofrecer una mejor forma de contar lo que está pasando en todo el mundo.

Antes hemos hablado de este tema y lo que vemos ahora forma parte de lo que hace para potenciar las características que le han permitido aumentar el número de sus suscriptores a un nivel tal, que esos ingresos ya han superado a los que recibe por publicidad, que es su fuente original de ingresos.

El diario ha ido comunicando estos cambios a sus suscriptores, quienes además, ya pueden verlos al ingresar al diario mediante un enlace especial. Los sustenta en tres características:

  • Experiencia similar, que se explica en que sin importar el dispositivo que se use, la interfaz funciona de la misma manera aunque se muestre de forma diferente. Para ello usan el concepto de “seamless experience” que de acuerdo a lo que plantea NNGroup, es lo que se debe conseguir cuando se trabaja en múltiples canales (lo que se conoce como omnicanalidad).
  • Facilidad de uso, que se refiere a que los editores tendrán más capacidades de agrupar temas similares, para ayudar a entregar contexto en tópicos que sean relevantes para cada persona.
  • Ayuda para tus intereses: recomendaciones, cada vez mejores de acuerdo a los intereses de quien visita el diario.

La diferencia en la diagramación del medio se pueden ver en las imágenes que se muestran en este post, los que se caracterizan, visualmente hablando, por contar con mayor espacio para las noticias (ocupando toda la pantalla disponible); más zonas vacías que generan descanso y resaltan la relevancia de ciertos contenidos y por último, mayor despliegue de elementos de apoyo al contenido que se revisa.

Esta es la portada del diario antes del cambio.
Esta es la portada del diario antes del cambio.
Así queda la portada luego del cambio.
Así queda la portada luego del cambio.

Lo que falta

Aunque lo que se está mostrando es un avance muy interesante y esperado, queda la sensación de que es la primera parte de los cambio que se deben hacer a la experiencia de informarse.

Sigo creyendo que para que ésta sea completa, más allá de que nos cuenten una historia que se refiera a ¿qué pasó? y ¿quiénes participaron?, hay espacios para hacer más y responder a más preguntas. Por citar algunas, ¿por qué pasó esto?, ¿qué puede pasar ahora?, ¿tengo algo que hacer o decir al respecto? y ¿quiero saber qué dijo alguien al respecto?

Creo que las respuestas a estas preguntas comenzarán a ser secciones de las interfaces de noticias en los próximos tiempos.